El presidente municipal de Matamoros, Mario López Hernández, como cualquier otro ciudadano llegó al palacio de esta ciudad para pagar el impuesto predial.
López Hernández, a su llegada tomó un número, se sentó junto a otros ciudadanos que esperaban su turno para pagar dicho impuesto. Mientras llegaba su turno para pagar intercambio palabras con los ciudadanos que ahí estaban.
Cabe mencionar que el alcalde fue atendido por la cajera Brenda Salazar Míreles, lo curioso se dio cuando el edil sacó el dinero, ya que un pequeño fajo de billetes de 200, 50 y 20 pesos los traía sujetados.
Al ser cuestionado subrayó que todo lo recaudado será invertido para el mejoramiento de las calles y avenidas de Matamoros, señaló que cerraron el 31 de diciembre con 60 millones de pesos invertidos en obra pública.
Agregó que las contribuciones se asignaron para el mejoramiento de los servicios básicos, en materia de alumbrado se invirtió fuertemente en la remodelación de las luminarias.