El presidente del PRI en Tamaulipas, SERGIO GUAJARDO MALDONADO puso la renuncia en la mesa después de su estrepitosa derrota en las urnas.
Los candidatos a las alcaldías, diputaciones y Senado nunca sintieron su apoyo, más bien cada que hablaba sentían el aliento de la traición.
Algunos consejeros no ocultaron sus sentimientos y se lo dijeron de frente, como es el caso del vicecoordinador de la campaña de MAGDALENA PERAZA GUERRA por la alcaldía de Tampico, ARTURO NUÑEZ.
En lo corto y en lo largo lo llamó vendido y aseguró en su momento que recibía las instrucciones del tercer piso.
Otros abanderados lo acusaron de quedarse con los apoyos que enviaban de la ciudad de México que era de 150 mil pesos por candidato, pero los recursos nunca llegaban y por el contrario les imponía cuotas por diversos servicios.
Empresas que se triangulaban a través de un sobrino de SERGIO GUAJARDO y un hermano de la candidata al Senado, YAHLEEL ABDALÁ CARMONA en un curioso negocio familiar.
El PRI no sólo perdió los comicios, también cayeron algunas de sus figuras más representativas, como la maestra MAGDALENA PERAZA GUERRA, quien se presumía como su mejor carta en la zona sur.
También se desmoronó JUAN DIEGO GUAJARDO ANZALDÚA, el hombre cuya apellido era toda una leyenda en Río Bravo y que desde hace varias generaciones dominaban el panorama electoral.
En Matamoros, el alcalde JESÚS DE LA GARZA DÍAZ DEL GUANTE, también fue sepultado políticamente. Terminó en el tercer lugar general, nada que festejar, muchas cosas por las cuales tendrá que llorar y reflexionar, aunque eso ya no le sirva de nada.
CHUCHÍN DE LA GARZA fue mal influenciado por un grupúsculo que le servían como consejeros económicos, administrativos y políticos. Compró el sueño de ser Senador y posteriormente gobernador, mientras les permitía cobrar sus favores económicos a través de empresas fantasmas y cursos de motivación inexistentes.
En ciudad Victoria, el mejor estratega político que tienen en la zona centro el PAN, ARTURO SOTO ALEMÁN fue el responsable del operativo que culminó con la derrota de ÓSCAR ALMARAZ SMER, la última ficha que tenía el PRI para la misión estatal.
Tras está dramática caída el PRI tendrá que refundarse en Tamaulipas, independientemente de las medidas que se decidan a nivel nacional. Una de esas primeras acciones es la renuncia de SERGIO GUAJARDO y todo su comité.
Hoy varias corrientes moviéndose por la dirigencia estatal del PRI, uno de ellas es del diputado federal ALEJANDRO GUEVARA COBOS, quien viene de perder la elección a Senador y quien se presumía era otra de las cartas para luchar en el futuro.
No es el único interesado, ya son varios priístas que levantan la mano, lo malo es que son personajes que presumen ser generales, pero no tienen tropa.
En Tampico, la candidata perdedora de Morena por la alcaldía, ROSA MUELA lanzó un interesante mensaje respecto a los resultados de las elecciones, en el que agradece los 30 mil votos que recibió, pero al mismo tiempo reconoció la victoria del panista JESÚS NADER NASRALAH:
”Les deseo a las autoridades electas, lo mejor para su ejercicio de administración y reitero mi compromiso con Tampico, con las mejores causas, con la honestidad y el beneficio para todos”.
ROSA MUELA, fue una priísta cobijada en sus anhelos por la sombra de ANDRÉZ MANUEL LÓPEZ PBRADOR, pero no le alcanzó la ola de Morena ante el blindaje azul de Tampico. Los marcianos también le van al PAN.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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