Vamos por partes, como para matar al gallo de la ignorancia. Al Señor Presidente no le importaba la Constitución Mexicana -seguramente dirán en defensa-, igual que todos anteriores mandatarios del país.
Sin embargo, cuando el decoro se pierde y la política se descarga bajo los comandos de Emperador Romano, dirían en mi pueblo, lo que cala es la risita, la sorna, el cinismo, el sarcasmo, la mezquindad como deporte, pues la certeza es que, los nacos son hoy y fueron antes, los mismos soñadores que no entienden que son menos que hormigas pisoteables.
El punto está vez, es que debemos en materia gris, revelar lo que está al descubierto, el Presidente actual Andrés Manuel López Obrador se asume supra constitucional, y en su usufructo, sus políticas son de abierta propaganda sin que le importe la Carta Magna, en el que es, un claro retroceso de la ya maltrecha democracia bananera nacional.
El ejemplo de esta semana, es el debate que se trae, cómo auto promotor de su «yo superlativo», para argumentar lo que es una verdad de alta perversión sobre el futuro de sus llamadas “Mañaneras”.
Y es que miren ustedes y mejor lean, la Construcción Política de los Estados Unidos Mexicanos, es clara para cualquiera que a los 5 años de edad ya saben leer. Empecemos con la Ley General de Comunicación Social que señala en su Título I, como disposiciones generales que
Artículo 1.- La presente Ley es de orden público e interés social, de observancia general en toda la República y reglamentaria del párrafo octavo del artículo 134 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, relativo a la propaganda, bajo cualquier modalidad de Comunicación Social.
Y como no me gusta en estos casos hablar en primera persona, calco para ustedes lo que está con toda precisión publicado en el Diario Oficial de la Federación y que puntualmente se publica en https://www.te.gob.mx/sites/default/files/44_articulo.pdf. Por si se dan tiempo de leer, antes de debatir sobre “lo mal que el INE trata al Señor Presidente”.
“La reforma electoral de 2007-2008 trajo consigo la adopción de un nuevo modelo de comunicación político-electoral que, entre otras cosas, introdujo una prohibición constitucional contra la propaganda política personalizada”.
Así, el 13 de noviembre de 2007 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (dof) una nueva redacción del artículo 134 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexi- canos (cpeum), que adicionaba tres párrafos, que a la letra dicen:
Los servidores públicos de la Federación, los Estados y los municipios, así como del Distrito Federal y sus delegaciones, tienen en todo tiempo la obligación de aplicar con imparcialidad los recursos públicos que están bajo su responsabilidad, sin influir en la equidad de la competencia entre los partidos políticos”.
“La propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como tales, los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social. En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público”.
“Las leyes, en sus respectivos ámbitos de aplicación, garan- tizarán el estricto cumplimiento de lo previsto en los dos párrafos anteriores, incluyendo el régimen de sanciones a que haya lugar (dof 2007)”.
1.- Que nadie olvide que la presión que ejerció el Partido de la Revolución Democrática, en la comandancia de Andrés Manuel López Obrador, en tiempos de su candidatura 2006 fueron atendidos por el Congreso de la época.
a.- Entonces suena divertido que AMLO acuse hoy de censura, cuando el Instituto Nacional Electoral antes IFE, solamente señaló lo que corresponde a la ley.
b.- De la Difusión de la Propaganda Institucional. Artículo 11.- “Durante el tiempo que comprendan las campañas electorales federales y locales y hasta la conclusión de la respectiva jornada comicial, deberá suspenderse la difusión de toda propaganda institucional de los entes públicos en los medios de comunicación”.
Como ven, la vida es sencilla si nos atenemos a la Carta Magna y el debate no existe, a menos que una de las partes considere que sus palabras están por encima de la Constitución.
Claro está, si el Congreso Actual o el siguiente en el escenario posible, cambia las reglas que ellos mismos pusieron como oposición perredista, pues ese es otro cantar, por lo pronto, las reglas son las vigentes y todo lo que se quiera argumentar en contexto es palabraría conveniente.
Cierto, saben que los nacos son y somos más y a eso se atienen…
Nostra Política: El gobierno constitucional es de todos y para todos, México no es un CCH chairo.
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